¿Te sientes descontenta? ¿Estás teniendo problemas económicos? ¿Tienes un trabajo que no tiene futuro? ¿Eres soltera pero quisieras estar casada? ¿O estás casada pero quisieras que tu matrimonio fuera mejor? ¿Anhelas tener más seguridad?

Pablo nos dice en Filipenses 4:11-13, No lo digo porque tenga escasez, PUES HE APRENDIDO A ESTAR CONTENTO EN CUALQUIER SITUACION. 12 Sé vivir con limitaciones, y también sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, tanto para estar satisfecho como para tener hambre, lo mismo para tener abundancia que para sufrir necesidad; 13 ¡Todo lo puedo en Cristo que me fortalece!

¿QUE ES EL CONTENTAMIENTO? El contentamiento QUE DIOS DA es una satisfacción en Dios solamente… sean cuales sean las circunstancias. ֎ Una persona contenta experimenta la paz de Dios aun en los momentos difíciles. Y conscientemente goza del hecho de que Dios es bueno pase lo que pase. El contentamiento es el opuesto a las quejas y la ingratitud.

¡NUESTRO MUNDO PROMUEVE EL DESCONTENTO EN NUESTRAS VIDAS! Estamos constantemente bombardeadas con cosas nuevas y mejores que harán nuestras vidas más completas… ¡SI SOLO LAS TUVIERAMOS!

Si escuchamos al mundo, siempre estaremos comparando los estilos de vida y las posesiones de otra gente con las nuestras… ¡Y SIEMPRE ESTAREMOS ENVIDIOSAS Y DESCONTENTAS! Si nuestro contentamiento viene de las posesiones, actividades, o de otra gente… ¡LAS PODREMOS PERDER EN CUALQUIER MOMENTO!

En cambio, si nuestro contentamiento viene de nuestra relación con Cristo… ¡NO HAY NADA NI NADIE QUE NOS LAS PUEDA QUITAR! Pablo había gozado del poder y el estatus entre su gente. Pero también había estado preso… encadenado en una celda.

El había estado en la presencia de un rey. Y a la vez, había sido apedreado por una multitud violenta. Pablo había gozado de los beneficios y los placeres de la vida. Sin embargo, él podía perderlo todo, Y AUN ASI… ¡ESTAR LLENO DEL GOZO DEL SEÑOR!

Su contentamiento no dependía “DE SU MEDIO AMBIENTE” sino de su relación con Cristo. El contentamiento te hace gozar de todas las cosas buenas que Dios te ha dado. El contentamiento demuestra tu fe -- de que Dios te ama -- y que tiene lo mejor para ti en mente.

El descontento viene del pecado de la ingratitud – Y DE NO CREER QUE DIOS TE AMA LO SUFICIENTE PARA PROVEER TODO LO QUE NECESITAS. ¡UN CORAZON AGRADECIDO NO TIENE LUGAR PARA LA ENVIDIA! Sin embargo, cuando la vida se vuelve dura, es difícil encontrar contentamiento.

El contentamiento no es algo que se encuentra… ¡SINO QUE ES ALGO QUE SE APRENDE! ¡PABLO HABLA POR EXPERIENCIA! El había pasado por los dos extremos: LA ABUNDANCIA Y LA POBREZA. ¡Y EL SABIA COMO LIDIAR CON LOS PELIGROS DE AMBOS! ¡ESTE ERA SU SECRETO!

¡SU SECRETO ERA SU CONFIANZA EN CRISTO! UNA CONFIANZA ADQUIRIDA A TRAVES DE SU EXPERIENCIA CRISTIANA. ¡SU FUERZA VENIA DE JESUS! Pablo no afirmaba tener esa fuerza interior. Su fuerza venia de Jesús… ¡VIVIENDO EN EL! Pablo estaba en Cristo, y por lo tanto, estaba contento sin importar cuales fueran sus circunstancias.

La vida cristiana no es solo difícil -- ES IMPOSIBLE -- a menos que OBTENGAMOS el poder de vivirla a través de Cristo. Definitivamente, que esta verdad no nos viene naturalmente… ¡PERO NECESITAMOS APRENDERLA! Para estar contenta, tienes que buscar positivamente, y experimentar activamente… ¡EL GOZO PROFUNDO QUE JESUCRISTO DA!

En este pasaje, podemos encontrar tres principios acerca del contentamiento. Principio No.1: Tú puedes aprender verdadero contentamiento.

En el vs 11, Pablo dice, No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a estar contento en cualquier situación.

¡Estas son las buenas noticias de Dios para ti! En medio de tus problemas y presiones, tú puedes aprender a estar contenta. ¡DIOS LO GARANTIZA! ¿CÓMO PUEDES ENCONTRAR CONTENTAMIENTO? ¿Nos cae del cielo? ¿Y cuándo nos despertamos por la mañana está ahí?

¿O viene cuando ESTAMOS SENTADAS “MUY DEVOTAS” en una banca de la iglesia? ¿O lo recibimos como un don espiritual? ¡LA RESPUESTA ES NO! Tú no recibes ni descubres el contentamiento. ¡TU LO APRENDES!

El contentamiento no es un misterio que hay que descubrir… ¡SINO UNA ACTITUD QUE HAY QUE CULTIVAR! Esto viene conforme crecemos en nuestro andar cristiano. NOSOTRAS VAMOS A PODER AGUANTAR LAS PRUEBAS… SOLO CUANDO LAS VERDADES DEL EVANGELIO CONTROLAN NUESTRAS MENTES.

Principio No.2: Tú puedes gozar del verdadero contentamiento a pesar de tus circunstancias difíciles. Una cosa es que Dios nos asegure que podemos aprender CONTENTAMIENTO, pero es otra cosa, cuando las dificultades de la vida se interponen con nuestra propia felicidad.

No solo es el contentamiento algo que puedes aprender, sino que es algo QUE PUEDES EXPERIMENTAR aun cuando las dificultades vengan.

Por eso Pablo dice en el vs 12 Sé vivir con limitaciones, y también sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, tanto para estar satisfecho como para tener hambre, lo mismo para tener abundancia que para sufrir necesidad. Esto puede sonar demasiado bueno para ser verdad. ¡ALGO SUPER ESPIRITUAL!

¡PERO PABLO NO ERA UN NINGUN FILOSOFO! El escribió estas palabras desde la prisión, en medio de una severa adversidad. ¡Este hombre vivió las lecciones que enseñó! PABLO ERA UNA PERSONA REAL ENFRENTANDOSE A PROBLEMAS REALES… ¡Y EL PRACTICABA LO QUE PREDICABA! ¡EL APRENDIÓ CONTENTAMIENTO!

Cualesquiera que sean tus circunstancias – ya sea si tienes presiones económicas, o una enfermedad, o has tenido un accidente, o estás descontenta con tu soltería o tu matrimonio, o estás desempleada, o tienes un trabajo que te agobia, o te sientes rechazada por otros creyentes, o menospreciada por tu fe… ¡JESUCRISTO PUEDE DARTE CONTENTAMIENTO!

¡EN TODAS LAS SITUACIONES, JESUCRISTO PROVEE CONTENTAMIENTO A AQUELLOS QUE CONFIAN EN ÉL… ¡Y LO SIGUEN!

Y Principio No. 3: Tú puedes encontrar verdadero contentamiento en Dios, y no en otro lugar. En el vs 13, Pablo dice, ¡Todo lo puedo en Cristo que me fortalece! Dándonos cuenta que la cristiana puede, en efecto, APRENDER CONTENTAMIENTO, y hacerlo, aun cuando se está enfrentando a cualquier cantidad de sufrimientos, nos llevan a la pregunta: ¿PERO CÓMO?

¿Cómo aprendió Pablo a tener contentamiento? ¿DE QUÉ O DE QUIEN VINO? La respuesta es simple pero profunda. ¡Pablo encontró contentamiento en Su Dios! EL CONTENTAMIENTO VIENE… NO DE NUESTRAS CIRCUNSTANCIAS… ¡SINO DE NUESTRO SALVADOR! ¡FLUYE DE NUESTRO PADRE CELESTIAL!

Dios nos promete verdadero contentamiento. ¡Y PABLO MISMO ES EL EJEMPLO DE ESTO! Pablo aprendió CONTENTAMIENTO confiando en la presencia poderosa de Dios, aun en medio de circunstancias difíciles.

Me encanta la historia de un papá que le dijo a su hijito que levantara un objeto bien pesado – una tarea que estaba más allá de la habilidad del chiquito. El objeto no se movía. “Trata de nuevo, hijo”. El niñito trató de nuevo sin éxito. “Hijo, no estas usando toda tu fuerza”. El chico trató de nuevo, pero aun así no pudo moverlo.

“Hijo, todavía no estás usando toda tu fuerza”. “Papi, papi. Estoy tratando. Estoy tratando”, gruñó el niño, a lo que se esforzaba con este objeto. “Estoy usando toda mi fuerza”. “No hijo”, le contestó su papá. “¡NO ME HAS PEDIDO QUE TE AYUDE!”

Mientras que sin Jesús no podemos hacer nada, ¡CON JESUS PODEMOS HACER LO IMPOSIBLE! Las demandas y las ansiedades nos pueden abrumar fácilmente, ¡pero no son rivales para el Hijo de Dios resucitado!

EL CONTENTAMIENTO ESTA BASADO -- NO EN TU AUTOSUFICIENCIA – SINO EN LA SUFICIENCIA DE DIOS. La vida de Pablo dependía de Jesús, no de sus propias habilidades o carácter. Por eso Pablo nos dice, ¡Todo lo puedo en Cristo que me fortalece! ¡SI!... ¡TODO LO PODEMOS EN CRISTO QUE NOS FORTALECE!